Se vivió un día de alegría este miércoles 30 de abril en el Centro de Medicina Nuclear y Radioterapia “PDTE. Dr. Nérstor C. Kirchner”, con el final del tratamiento para dos pacientes oncológicos, de clorinda y capital.
Este es Ramón Prieto y Claudia Duarte, que estuvieron acompañados por familiares y amigos, apoyo fundamental en todo tratamiento médico.
Además de tocar la campana, hubo tiempo para el baile, como una ofrenda de agradecimiento por todo el personal médico que brinda servicios en este centro público, único en el noreste argentino.
Ramón, visiblemente emocionado, le dijo al Agencia de noticias de Formosa (Agenfor) El hecho de que se sintiera muy bien asistido tanto por médicos, enfermeras y toques la campana, como símbolo del final de su tratamiento, es “cómo llegar a la meta” en una carrera.
“Esta posibilidad existe en Formosa, no es necesario mudarse a otra provincia, es un logro que tenemos como provincia. Agradezco a Dios”, dijo.


Mientras tanto, Claudia, que es personal de salud en el Hospital Cruz Felipe Arno de Clorinda, proporcionó un valioso testimonio, mientras agradecía al sistema de salud Formoseño por permitirle realizar todo su tratamiento en Formosa, evitando el desarraigación.
En diálogo con Agenfor Dijo que una vez que se recibió el diagnóstico de cáncer de seno, evaluó todas las posibilidades de enfrentar su tratamiento, incluido Buenos Aires. “Como agente de salud, sé que tenemos lo mejor que podemos tener, en nuestra provincia y lo mejor que estar acompañado de familiares”, dijo.
“Es un ejemplo y un lujo que tenemos aquí, tenemos una mascota, una tomografía en la que se analiza todo el cuerpo y usted sabe dónde hay células cancerosas. En Buenos Aires necesita un cambio de seis meses, aquí lo tenemos en la provincia, cuando el oncólogo lo decide”, se expandió.
Después de tocar la campana, dijo que sintió felicidad por “terminar otra etapa, tan completa, emocional y físicamente, y qué decir con el acompañamiento de toda la familia”.



Un hito significativo
Entre todo el personal médico que participó en esta emoción, estaba el Doctor Lucas Stringer, un especialista en oncología radioterapástica de la institución, que señaló que el toque de campana es un “hito significativo en la evolución de la enfermedad del paciente” que cruzó un largo proceso, del diagnóstico inicial.
En el caso de la institución, señaló que “el servicio de tratamiento nos complace ayudar a los pacientes a completar sus tratamientos en tiempo y forma”.
Explicó que la radioterapia es un tratamiento que forma parte del arsenal terapéutico que ahora está disponible para el tratamiento del cáncer y señaló que el centro es único en la NEA, debido a la complejidad de los tratamientos que ofrece.
También dijo que los pacientes llegan al centro, después de la derivación médica y el diagnóstico apropiado, y existe un enfoque articulado entre todas las especialidades.
En cuanto a los costos, dijo que estos son tratamientos costosos. “Dependiendo de la cobertura, los pacientes que vienen por el ministerio, la provincia cubre por completo el tratamiento y luego cada trabajo social tiene diferentes acuerdos con el centro y cubre los tratamientos para eso”, dijo.