Un silencio lleno de murmullos (Seix Barral), la última novela del escritor nicaragüense Hermosos juegoses, según el escritor, un Reconocimiento de hijas Ya los hijos de la generación que era parte de las revoluciones en América Latina. Pero también, en sus palabras, una forma de procesar “DesilusiónCreo que es algo que todos llevamos en América Latina, teníamos la esperanza de que otro mundo fuera posible. “
El nicaragüense, Figura clave de la literatura latinoamericana contemporáneaestá en Buenos Aires para presentar esta nueva novela, que cierra la trilogía comenzó con La mujer habitada Y El país debajo de mi piel. Escrito durante la pandemia, Se enfoca en Penélope, hija de una madre revolucionariaY es un tributo a las generaciones que crecieron entre los ecos de las luchas sociales.
En diálogo con ClarínBelli reflexionado sobre El impacto de la revolución en las relaciones familiaresLa conexión entre la literatura y la transformación social, y el papel esencial de las mujeres como creadoras y lectores. De Tu exilio en Españareafirma su compromiso con la literatura como una herramienta de resistencia y esperanza ante los desafíos actuales.
– “Los hijos de aquellos que se involucran en la revolución sufrieron una especie de abandono. El de los Padres fue aceptado. Otra cosa sucedió con las madres. Esa ausencia materna cargó a ambas partes con un nivel muy doloroso de reproche y culpa. He pensado en mis hijas que escribieron esta novela”, dijo sobre Un silencio lleno de murmullos¿Por qué crees que esto sucede?
– Debido a que a los hombres se les permitía todo, ni pensaba dos veces: ellos fueron los que hicieron la guerra, aquellos que integraron al gobierno, los hombres siempre han tenido una vida pública muy aceptada, es lo que se esperaba de ellos. A cambio de mujeres, no. Para nosotros fue la esfera privada y doméstica, nos pusieron en ese pequeño mundo porque incluso si es bueno criar a nuestros hijos, es realmente un mundo limitado. Entonces, si la mujer va a una revolución, por ejemplo, siempre hubo una carga de culpa, tanto socialmente impuesta como la misma que se le dio la misma. Este libro para mí es muy importante porque es el cierre de una trilogía que comenzó con la mujer habitada y continuó con El país debajo de mi piel. Y esta novela trata sobre cómo resolver el tema de la decepción, que creo que es algo que todos llevamos en América Latina, esperamos que sea posible otro mundo. Tuve la enorme suerte de vivir el triunfo de la revolución en 79, que fue un regalo de la vida. Pero luego obtenemos grandes decepciones porque nunca esperamos la terrible represión que fue más tarde y que me tiene en este momento, por ejemplo, en el exilio. La mayoría de nosotros abandonamos a Ortega cuando comenzó a traicionar lo que consideramos los ideales de la revolución. Me han eliminado de mi nacionalidad, han declarado un traidor a la patria, sin evidencia, sin juzgar, sin el derecho a la defensa, mi casa, mi retiro, se han quitado.
La mayoría de nosotros abandonamos a Ortega cuando comenzó a traicionar lo que consideramos los ideales de la revolución.
– ¿Dónde está esa esperanza hoy?
– Creo que estamos entrando en un escenario oscuro en la historia con personas que nunca habrían tragado en un pasado: que alguien como Trump ha ganado las elecciones en los Estados Unidos, que Milei ha ganado las elecciones en Argentina, que Ortega continúa gobernando en Nicaragua. Creo que los proyectos tienen que ingresar a un proceso de análisis y que necesitamos más creatividad para imaginar lo que puede venir.
– ¿Cómo trabajaste para interpretar la voz de Penélope, la protagonista de la historia, hija de Valeria, la revolucionaria?
–Lié comencé la novela en la pandemia. Tuve mucho trabajo y Penélope captó mi atención. Uno cuando puede hacer una novela, no siempre sabe lo que está buscando. Sabía un poco que quería encontrar consuelo, ver cómo se podía manejar esa decepción, pero al mismo tiempo no sabía cómo y no quería hacerlo desde mi propia historia. Siempre he tenido en mente a mis hijas, he tenido grandes conversaciones con ellas (puedes imaginar que para ellas no fue fácil) y luego pensé: ¿Por qué no darles reconocimiento? Y no solo para ellos, sino para todos los jóvenes que vivieron con sus padres durante esos procesos y que tuvieron que soportar el dolor, los sufrimientos, los aislados. Parecía bueno reconocer que otra parte de estos grandes heroísmo, ponerlo de alguna manera, porque también hay un heroísmo de nuestros hijos. También quería testificar la pandemia porque parecía un momento muy importante. No quería tomar un lugar preponderante, pero era como un marco.
– ¿Un marco para la soledad?
– Lo pensé como un momento en que el protagonista se construye dentro del silencio, de la conciliación y la búsqueda de los documentos de la madre. Realmente me gustan las novelas góticas, así que también puse un poco de misterio.
– Es una novela en la que, como sus libros anteriores, las mujeres tejen redes entre ellas para mantenerse y acompañarse.
– Siempre me molesta cuando los hombres, sobre todo, tienen ese discurso que las mujeres son peores entre nosotros. Y creo que eso es absolutamente falso, los tiempos que he necesitado apoyo, que me he enfermado, que he estado deprimido, ¿quién me ha salvado? Mis amigas, mujeres. Y creo que las mujeres, en ese sentido, tienen la capacidad de comprender al otro que es muy profundo, porque además todos vivimos vidas similares, sufrimos cosas similares. He viajado mucho con mis novelas y lo que me sorprende es conocer mujeres en Italia, en Francia, en Holanda que se sienten representadas.
– ¿Cómo se ha recibido su trabajo en los otros países del mundo, ya que resultó en más de 20 idiomas?
-– Todos estamos limitados a una geografía y una historia, pero creo que lo que nos articula es la experiencia humana, no solo de las mujeres, sino también de los hombres que están en las novelas.
– ¿En qué estás trabajando ahora?
–Ahorita estoy pensando. Todavía no estoy trabajando en particular. Tengo varias ideas, porque afortunadamente todavía tengo las ideas, entonces a veces lo que hago es escribir 50 páginas y si a las 50 páginas estoy enganchado, creo que me voy bien. Pero no he comenzado; Tengo una larga historia que quiero ver a dónde vas.
Tengo una relación amorosa con Argentina que comienza con mis lectores y mis lectores y tengo la expectativa de encontrar mi rostro con esas personas.
– ¿Qué expectativas tienes para la feria del libro?
– Espero conocer a mis lectores. Tengo una relación amorosa con Argentina que comienza con mis lectores y mis lectores y tengo la expectativa de encontrar mi rostro con esas personas. Siempre me doy una gran alegría para estar en una habitación donde ves a la gente reaccionando a lo que estás diciendo y realmente es impresionante. Cuando uno comienza a pensar cuán solitario es el comercio y cuán repentinamente te das cuenta del eco que han tenido tus palabras, es algo impresionante.
– ¿Es en esas reuniones donde te das cuenta de cómo tus lectores se han transformado con tus libros?
– Y cómo la lectura me ha transformado. No sería quien soy si no hubiera leído los libros que leí.

– ¿Y cuáles fueron los que te transformaron?
– Desde Julio Verne, quien me hizo abrir las puertas de la imaginación, hasta todas las novelas inglesas, por Jane Austen, por Charlotte Brönte y después de Virginia Woolf, quien es mi gran maestra, la adoro. También fui transformado por libros como Los condenados por la tierra, Frantz Fanon, que cambió mi vida, Rayuelade Cortázar, que tuvo el enorme placer y privilegio de saber cuándo era un jurado del premio Casa de Las Américas y él era un jurado ese mismo año. Julio fue a Nicaragua y nos hicimos amigos. Era un ser tan bueno y tan noble, además de un gran escritor. Recientemente estuve en Austin, Texas, donde hay una de las colecciones más importantes de manuscritos de literatura latinoamericana y tuve en mis manos el manuscrito de Rayuela. Borges también me fascinó, García Márquez, Carlos Fuentes, Donoso: El boom fue muy importante en mi vida.
– ¿Qué mujeres te gustan?
–Luisa Valenzuela, Mariana Enriquez, Claudia Piñeiro, Camila Sosa Villada, Samantha Schweblin, Gabriela Cabezón Cámara, Fernanda Trías, Pilar Quintana, Paulina Flores, Marcela Serrano. We have tremendous writers.
– ¿Crees que la cultura puede ser uno de los faros actuales?
– Sí, y mujeres: creo que contribuimos mucho a ver el mundo y la literatura. Hemos sido silenciados durante tanto tiempo … en España, donde estoy viviendo ahora, estoy impresionado por la cantidad de clubes de lectura y todas son mujeres: las mujeres leen el 70% de los libros de ficción en el mundo. Tenemos inteligencia para apreciar la belleza de la imaginación.
Bellonda Belli Básico
- Nació en Managua, Nicaragua. Ganador del Premio Breve Biblioteca y el Premio Sor Juana Inés de la Cruz por su novela El infinito en la palma de la mano (2008), también es autora de la novela icónica La mujer habitada (1988), que ganó en Alemania el premio de los libreros, bibliotecarios y editores a la novela política del año y el Premio Anna Seghers de la Academia de Artes.

- Otras novelas tuyas son Sofía de presagios (1990), Waslala (1996), El pergamino de la seducción (2005), El país de las mujeres (2010, la otra orilla), El intenso calor de la luna (2014) Y Un silencio lleno de murmullos (2024). El también ha publicado El país debajo de mi piel (2001; 2024), sus memorias durante el período Sandinista. Su trabajo poético ha recibido el Premio Mariano Fialos Gil en Nicaragua, la Casa de América en Cuba y la generación de 27 y Melilla City en España.
- En 2011, Seix Barrral publicó Antología poética Escándalo de miel. Ella también es la autora de la colección de prueba Rebeliones y revelaciones (2018) y tres historias para niños: El taller de mariposas (2004), El apretado abrazo de la vid (2006) Y Cuando florecía la risa (2017).
- Otorgado en 2018 con el Premio Eñe Festival por toda su carrera, con el Premio Hermann Kesten por su compromiso con los derechos humanos y con el Premio Reina Sofía de Poesía Ibero -Americana en 2023, también ha recibido el título de Chevalier of the Arts and Letters y es Presidente de la Pen Nicaragua. Su trabajo se traduce en más de veinte idiomas.
Gioconda Belli será este sábado en la feria de libros que participa en 19 del ciclo de América Central, tierras en la Feria del Libro de Buenos Aires con Luis Chaves (Costa Rica), Luis Lezama (Honduras) y Melisa Rabanales (Guatemala) en la sala de la Sala de Alfonsina. Y mañana el domingo, a los 19 años, presentará su nuevo libro en la sala Julio Cortázar.