Sobre la segunda declaración del ex presidente Álvaro Uribe, en el juicio de soborno a testigos y fraude procesal, La oficina del fiscal varias veces el interrogatorio de la defensa. Para el delegado de la entidad acusadora, algunas de las preguntas fueron repetitivas, entre otras objeciones.
La situación causó un breve choque entre Jaime Granados, el defensor de Uribe y el delegado de la parte acusadora.
–Granados: “El ex presidente, ¿cuándo tenía conocimiento sobre la transferencia de la Sra. Ex Hilda Niño del Buen Pastor a un lugar ordenado por la autoridad judicial competente?”
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–Fiscal: “Honor, eso ya respondió”.
–Granados: “No, no, esa pregunta no había hecho, hasta ahora el Formulo, honor. Ahora, si el fiscal no está interesado en escuchar al testigo, en este caso el acusado, la defensa está interesada en escucharlo”.
–Fiscal: “No más, es mi papel como fiscal escuchar todos los testimonios. Luego respeto, médico, que lo he respetado en todo momento. Objeción, su honor, porque en las respuestas que la fiscalía ha dado, ha declarado que nunca ha tenido conocimiento, nunca tuvo conocimiento de esa transferencia”.
-–Granados: “Esa pregunta no le había hecho, por lo tanto, no podía responder lo que he hecho. Gracias, honor”.
El cruce entre la defensa y el fiscal terminó con la intervención del juez, quien rechazó la objeción y ordenó a Uribe respondiendo la pregunta.
Nueve horas después de comenzar el segundo día de interrogatorio, se suspendió la diligencia. Al salir de los tribunales, el ex presidente asistió brevemente a la prensa.
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Allí, dijo que detrás de este proceso Hay un complot en el que participaron los presuntos aliados políticos del FARC.
“Los aliados políticos de la FARC deben ser investigados (…) Aquí están los aliados políticos del FARC”, dijo.
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