Hay películas que parecen escritas con una plantilla ya gastada y otras, como esta, que cada emoción se despiertan. David Valero, cineasta de Pico y Pisa, Zambulle to the Spectator en esta historia de resentimiento y venganza que explora un tema delicado como el acoso escolar con una dignidad inusual y sin caer en la victimismo manual. Y lo hace con un aire inequívocamente NAIF (ver el tramo final) para dibujar una mano firme un mapa de consecuencias que no deja indiferente.
Con una puesta en escena que respira el vecindario sin caer en la postal de miserabilistas, Valero no se deja llevar por el grueso subrayado, incluso si no rechace algunos temas, para explorar el abismo del odio. Muestra una narrativa tensa en un entorno marginal en el que los eventos se siguen con una precisión trágica que sacude a ambos. Víctima y verdugo, acosado y acosador, en el fondo, han tatuado las mismas cicatrices. Y al mismo tiempo, también quién mira. Y es que un drama visceral, genuino y, sobre todo, honesto como este, se gana más que por lo que grita, por lo que es silencioso. A veces, esa es la diferencia entre la cinta prefabricada y la que se queda con usted cuando las luces están encendidas a pesar de sus imperfecciones.
Para aquellos que buscan un drama honesto que esquiva los golpes bajos
El mejor: El duelo checo cristiano – Hugo Welzel.
El peor: Ciertas concesiones en el tramo final.
Archivo técnico
DIRECCIÓN: David Valero Guion: David Valero, Alfonso Amador Departamento: Christian Czech, Hugo Welzel, Estefanía de los Santos, Luna Pamies, Sara Vidorreta, José María Peinado, José Manuel Puga País: Espacio Año: 2025 Fecha de estreno: 09-05-2025 Género: Drama Duración: 103 min.
Sinopsis: Un adolescente acosado y su agresor cruzan sus caminos nuevamente años después en el mismo vecindario que trabajaba donde se creó la violencia. En esa reunión sin una red, que parecía resurgirse enterrada fuertemente, atrapando tanto en una espiral de resentimiento, culpa y redención.

Ver el cine desde mi primera infancia. Crecí en las salas continuas de restringe, y cuando pudieras, en el estreno y adicto a las sesiones de la tarde y “la llave”. Más de 30 años hablando y escribiendo desde el cine donde me necesitan. Siempre quise ser Nick Rivers: “Top Secret” está en mi parte superior. Amo a “el tercer hombre” y Palma es mi Dios.