Por ahora, a pesar de que continuó la bajada de tipos y se eliminó el tipo de interés mínimo para préstamos Plazos fijos minoristas, el mes pasado hubo un rebote de colocaciones a término. Crecieron 18,3% respecto al nivel de febrero, lo que implicó un aumento real de 5,6%. Según la consultora LCG, esto podría deberse a que, aunque continuó la reducción de los rendimientos, la tasa efectiva mensual (TEM) en marzo fue menos negativa que, por ejemplo, la de enero, cuando la inflación aún estaba por encima del 20. %. . Es decir, pasó del -10% real TEM al -4,5% entre el primer y tercer mes del año.
Pero esto ocurrió después de una serie de caídas tan abruptas que En la medición interanual mantiene un desplome del 58,5% En términos reales. “Aun con la recuperación del margen de los depósitos a plazo, el stock medido en términos reales cayó 43% desde noviembre y está en valores de hace 21 años y el plazo promedio sigue siendo limitado: apenas 53 días”, analizó LCG.
En definitiva, la caída mensual se explica por una fuerte caída del 9,2% en términos reales de los depósitos en cuentas a la vista, que en doce meses ya han caído un 29,3%. La expectativa predominante entre los especialistas es que el dinero en cuentas de ahorro y cuentas corrientes (no pagadas) seguirá disminuyendo en términos reales debido al deterioro del poder adquisitivo generado por la inflación que se mantiene en niveles muy elevados. Los fondos del mercado monetario (liquidez inmediata), plazos fijos a 30 días y dólares son los destinos más probables.
En tanto, los depósitos privados en dólares crecieron 2,9% en marzo y cerraron en US$ 16.903 millones. Fue el quinto rebote consecutivo.
Préstamos
El crédito bancario al sector privado es un indicador que da señales significativas sobre la dinámica de la actividad económica. Y los datos de marzo reflejan la Profundización del escenario recesivo: préstamos en pesos cayeron por quinto mes consecutivo, esta vez en todas las categorías. La caída respecto a febrero fue del 5,9% en términos reales y en términos interanuales, del 37,5%.
En el caso de préstamos a compañías, la caída fue de 4,1% real mensual tanto para el descuento de documentos como para los anticipos. Acumulan una caída del 31,5% interanual.
Pero la caída fue aún mayor en el financiamiento al consumo (6,4% real mensual), en un contexto de fuerte deterioro del poder adquisitivo del ingreso. En comparación con hace un año, la caída se aceleró hasta el 39,3%. En marzo, el Las operaciones con tarjetas de crédito se hundieron 7,7% en términos reales y los préstamos personales cayeron un 3,1%.
También se registraron fuertes caídas en los créditos hipotecarios (11,1% mensual en términos reales) y prendarios (4,9%). En general, los préstamos con garantía real se desplomaron un 53,2% interanual.
La razón de estas cifras reside en la fuerte recesión. “Al problema del desabastecimiento, en los últimos meses se ha sumado caída de la demanda debido al colapso de la actividad”, dijo LCG..
De cara al futuro, la consultora afirmó que “la demanda y oferta de crédito seguirían viéndose afectadas por la importante caída de la actividad y la aún elevada inflación”. Y concluyó: “No esperamos una recuperación del crédito a lo largo de 2024”.
