La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicas (OCDE) pidió una reforma fiscal global, dado que, según reveló un nuevo informe, las empresas multinacionales siguen reportando ganancias con impuestos bajos.
El organismo internacional explica que alrededor del 37,1% de los beneficios netos de las grandes empresas, 2.411 millones de dólares de 6.503 millones de dólares tienen una tasa impositiva corporativa inferior al 15%.
“Estos resultados muestran cómo la introducción de un tipo impositivo mínimo global sobre los beneficios de las grandes multinacionales”, tal y como se acordó en el marco de la OCDE y el G20, “crearía nuevas oportunidades para la movilización de recursos internos” en todo tipo de jurisdicciones , señala el comunicado.
El informe también reveló qué países deben pagar los impuestos más altos, entendido como la tasa legal del impuesto sobre la renta de las empresas (plana o marginal superior) del gobierno central. En el ranking, Colombia es el que tiene mayor carga tributaria para las empresas, con un cargo por impuesto a la renta del 35%, tasa que viene creciendo, dado que para 2021 estaba en 21%; seguido de Australia, México y Portugal, cada uno con un valor que se fija en el 30%.
“Estas tarifas por país son nominales, son las que las empresas deben pagar según ley. Pero, pese a ello, los gobiernos cuentan con mecanismos de deducción que en muchos casos hacen que las empresas acaben pagando muy por debajo de esos valores. Por eso se creó una tasa fija para que ninguna empresa destine menos del 15% en el impuesto a la renta”, explicó Sebastián Trujillo, exnegociador de la OCDE.
Frente a esto, una vez más el ex Ministro de Hacienda José Antonio Ocampo dijo que, como la mayoría de los países tienen tasas impositivas tipos corporativos del 25% al 35%, un tipo global de alrededor del 15%, como el que prevalece actualmente, es demasiado bajo y, por tanto, es probable que conduzca a una reducción significativa del traslado de beneficios.
Es hora de decir basta con los abusos fiscales de las multinacionales y los superricos. Instamos a los EE.UU., a la UE y a todos los países latinoamericanos a que en la votación de mañana en el @UN_es decir sí a una convención fiscal de las Naciones Unidas. nuestra carta en @ProSyn…
— José Antonio Ocampo (@JoseA_Ocampo) https://twitter.com/JoseA_Ocampo/status/1726958340591210889?ref_src=twsrc%5Etfw
“Una votación en las Naciones Unidas decidirá si el futuro de la toma de decisiones fiscales globales surgirá de la negociación de una convención marco genuinamente inclusiva. o si un grupo de países ricos logrará insistir en mantener los actuales acuerdos ineficaces y excluyentes”,
“La importancia de la votación del miércoles refleja la urgencia de abordar la injusticia y la ineficiencia del actual sistema de impuestos corporativos y patrimoniales. También es una llamada de atención para que el mundo utilice principios multilaterales para lograr soluciones multilaterales.. El éxito demostraría que el mundo puede forjar un multilateralismo diferente y mejor, verdaderamente inclusivo pero también capaz de implementar reformas fundamentales”., se lee en un artículo publicado por José Antonio Ocampo junto con Jayati Ghosh y Joseph e. stiglitz.
En otras conclusiones del informe, el tamaño de los ingresos por impuestos corporativos también se midió en relación con los ingresos tributarios totales y el PIB, que varía según los grupos de jurisdicciones. En 2020, los ingresos por impuestos corporativos representaron una proporción mayor del impuesto total en promedio en África (19,3% en las 30 jurisdicciones), Asia y el Pacífico (18,8% en los 29 jurisdicciones) y América Latina y el Caribe (ALC) (15,6% en las 27 jurisdicciones) que la OCDE (9,0%). Los ingresos promedio por impuestos corporativos como porcentaje del PIB fueron los más altos en ALC (3,4% en las 27 jurisdicciones), seguido de Asia y el Pacífico (3,1% en las 29 jurisdicciones), África (3,1% en las 30 jurisdicciones) y la OCDE (2,8%).
