Pese a la grave crisis económica, el municipio de Cipolletti cerró su balance financiero con un superávit millonario en el primer trimestre de 2024. Según datos oficiales publicados por la Contraloría, las arcas municipales gozan de buena salud y tienen un remanente de casi 20.000 millones de pesos, poco más del 10% del presupuesto anual.
Pero ¿por qué a un municipio que hace meses declaró emergencia económica le “sobran” tantos millones de pesos? La respuesta se centra principalmente en la recaudación. Los primeros meses del año son los que más recursos generan principalmente por el aporte de la coparticipación nacional y provincial.
Si bien hubo un recorte en los recursos enviados a nivel nacional, lo más recordado fue la eliminación del subsidio al transporte público, la La recaudación fue buena para el Poder Ejecutivo local.
Otra variable importante fue la recaudación de impuestos municipales. El municipio ofreció generosos descuentos. para el pago semestral y anual de impuestos municipales y ese flujo acumuló otros tantos millones de pesos.
El resumen del informe trimestral arrojó que la recaudación fue de 6.229 millones de pesos, de los cuales se ejecutaron 4,48 millones. El saldo a favor al cierre de marzo fue de 1,920 millones de pesos.
Fuentes consultadas del Poder Ejecutivo explicaron que es “normal” porque hubo muchos ingresos en ese primer tramo del año, pero en el actual período el saldo estará más equilibrado porque la ejecución se mantiene y la recaudación no.
También se explica, y fue reconocido por funcionarios municipales, que el alcalde Rodrigo Buteler estableció una política de gran austeridad en la gestión de las cuentas municipales. La decisión de recortar el personal municipal al inicio de la gestión fue una de las decisiones que tomó el abogado y exfuncionario provincial.
Fue el primer conflicto que tuvo con los sindicatos. Si bien hubo un compromiso de revisar la situación de cada trabajador contratado, prácticamente no hubo reintegros.
Del documento oficial se desprende que se recaudaron entre el 35 y el 38% de los impuestos municipales y no tributarios, por encima del promedio de ese segmento del año. Otro rubro que estuvo por encima de lo proyectado es el cobro de multas, que en marzo alcanzó el 40% de lo presupuestado: casi 300 millones de pesos.
A fines del año pasado, el Concejo Deliberante declaró emergencia económica en Cipolletti y otorgó nuevas herramientas al Poder Ejecutivo para utilizar los recursos del Estado municipal. Uno de ellos es la facultad de rescindir prórrogas o renegociar contratos. “ya sean obras, servicios, suministros, concesión pública, consultoría y/o de cualquier otra índole, concluidas antes del 9 de diciembre de 2023, incluyendo los honorarios establecidos, de los cuales sea parte el Municipio de Cipolletti”.
La primera medida que tomó el jefe comunal fue recortar la plantilla política en un 40% respecto a la administración anterior. Después “Rebajó” muchos contratos de empleados municipales. También se recortó el reparto de alimentos en los comedores y merenderos de la ciudad y se copió la estrategia nacional con la política social: atender la demanda directamente con los ciudadanos.
