LA HABANA, 7 jun (Xinhua) — El Gobierno cubano ratificó la disposición gubernamental de abrir las puertas a la llegada de vacacionistas chinos a la isla caribeña, lo que intenta impulsar la llamada industria del ocio.
“Ahora el desafío es consolidar paulatinamente ese necesario aumento de los flujos turísticos”, afirmó hoy el primer ministro cubano, Manuel Marrero, al reunirse con un grupo de representantes de agencias de viajes chinas, que realizan un viaje de familiarización con la industria turística de la isla.
Hace unas semanas, el Gobierno cubano anunció la eliminación de los requisitos de visado para los ciudadanos chinos con pasaporte ordinario y la aerolínea Air China inició vuelos directos a La Habana desde Pekín, con escala en Madrid.
Marrero destacó la voluntad del Gobierno chino de incrementar la presencia de turistas chinos en Cuba, como mecanismo de apoyo a la economía de la isla.
El primer ministro destacó la responsabilidad que asumen las autoridades turísticas del país caribeño de ofrecer una excelente estadía a los vacacionistas chinos.
“El aumento de las visitas de turistas chinos a nuestro país nos enriquece culturalmente y fortalece los intercambios entre los pueblos, pero también contribuye a mejorar la calidad de vida de los cubanos”, subrayó.
Marrero hizo un breve resumen de los problemas económicos que sufre el país a raíz del bloqueo que Estados Unidos mantiene contra la isla desde hace más de seis décadas.
“Visitar Cuba es ayudar al pueblo de Cuba, por eso estamos eternamente agradecidos”, afirmó.
Por su parte, el titular del Ministerio de Turismo (Mintur) de Cuba, Juan Carlos García, esbozó los objetivos de esa institución ante un eventual aumento de vacacionistas chinos.
“El primer objetivo ahora es llenar los aviones de Air China”, afirmó el ministro, que también agradeció a la aerolínea su fuerte apuesta por realizar dos vuelos semanales entre ambos países.
Según García, los otros objetivos serán, en el mediano plazo, abrir conexiones aéreas desde Shanghai o Guangzhou, y crear las condiciones para que las cadenas hoteleras chinas inviertan en hoteles en Cuba.
“Vamos a consolidar lo que estamos iniciando y China será uno de los principales emisores de turistas para Cuba”, subrayó García.
Varios participantes en el viaje de familiarización expresaron las experiencias vividas durante nueve días y ocho noches de estancia en la Isla, donde visitaron varias ciudades con un rico patrimonio cultural, histórico y patrimonial.
Una de las organizadoras del viaje, Lulu Chen, de la agencia Alifante Tur, explicó la labor de esa institución, que está dispuesta a fortalecer las relaciones entre China y Cuba.
“Aunque nos separa el Océano Pacífico, el camino de la amistad no es largo debido a la inmensidad del mar, por lo que esperamos trabajar juntos para que más personas en China conozcan, entiendan y amen a Cuba”, afirmó.
Han Qingshan, de Tianbo International Travel, explicó también que desde el mes pasado sienten una presión muy fuerte con la cantidad de reservas de chinos que quieren venir a Cuba como turistas o en delegaciones.
Intervino la gerente Maggie Liu de HCG International Travel Services, quien destacó que la mayoría de los turoperadores del grupo llegaron por primera vez a la Isla y pudieron descubrir “una Cuba muy diferente y apasionante con experiencias que superaron nuestras expectativas”.
“Los 18 que integramos este grupo tenemos relaciones turísticas de larga data con Cuba, sin embargo, para muchos es la primera vez que venimos y con las experiencias adquiridas podemos sumar nuevas ofertas al paquete turístico”, afirmó Ge Mu, gerente de la agencia Caissa.
Hace unos días, autoridades cubanas de turismo anunciaron que China será el País Invitado de Honor en la próxima Feria Internacional de Turismo (FIT Cuba 2025).
Según cifras oficiales, al cierre de mayo pasado, el mercado chino creció un 36 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
Cuba recibió el año pasado 2,4 millones de turistas.
El turismo es el principal aportador de divisas a la isla, después de la exportación de servicios médicos, y es considerado un sector que “arrastra” otras áreas de la economía local.
