Publicado: 2024-06-05 18:15:09
En respuesta a las crecientes preocupaciones sobre la seguridad en los departamentos de Casanare, Boyacá y Arauca, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, anunció un plan para fortalecer la presencia y eficacia de las fuerzas de seguridad en la región. Esta decisión se tomó luego de un consejo de seguridad en Yopal, donde participaron líderes regionales y autoridades civiles, militares y policiales.
Como primera medida, la Armada de Colombia desplegará cuatro nuevas embarcaciones de vigilancia fluvial para intensificar el control sobre los ríos, cruciales en la lucha contra actividades criminales que utilizan estos cursos de agua como vías naturales para sus operaciones ilegales.
Además, el Ejército y la Policía Nacional incrementarán su presencia en las vías de los departamentos de Casanare, Boyacá y Arauca.
El ministro Velásquez destacó la importancia del encuentro con los tres gobernadores, subrayando la necesidad de una visión integrada y regional para abordar los problemas comunes de seguridad.
“Los gobernadores de los tres departamentos tenemos una problemática común en varios aspectos, por eso coincidimos en que era oportuno crear un consejo como este para abordarlos con una visión regional. Entre los tres gobernadores está ese propósito de integración regional y así proponer soluciones igualmente regionales que incluyan a todos estos territorios”, afirmó el ministro.
Velásquez destacó la preocupación del Ministerio de Defensa por el control de los ríos, destacando la llegada de las cuatro embarcaciones para mejorar la supervisión de los ríos, crucial para frenar las actividades criminales en estos territorios.
“Tenemos la meta, desde el Gobierno, de poder fortalecer al máximo el control de los ríos que, para territorios como este, son vías muy rentables para el desarrollo de actividades criminales. La Fuerza Pública tiene que desarrollar toda su capacidad para ampliar ese control”, afirmó.
Finalmente, el Ejército y la Policía Nacional se comprometieron con los gobernadores y autoridades locales a incrementar los controles viales para prevenir el tránsito y tráfico de narcóticos, así como actores de grupos criminales que buscan desestabilizar la región con fines económicos asociados a la ilegalidad.
