El colegio Adolfo Pérez Esquivel realizó un taller sobre Prevención del Consumo Problemático – www.mendoza.edu.ar – .

El objetivo del encuentro fue generar un espacio de reflexión y construcción colectiva de estrategias en el ámbito educativo sobre el tema, desde un enfoque integral que involucre la participación activa de la familia.

La comunidad educativa del colegio 4-128 Adolfo Pérez Esquivel, de la ciudad, encabezada por su directora Mariana Marino, llevó a cabo el taller “Prevención del Consumo Problemático”, impartido por Facundo Cócola, del Plan Provincial de Adicciones de Mendoza dependiente del Ministerio de Salud, dirigido a las familias de estudiantes de quinto año, con el objetivo de conocer la multicausalidad que lleva al consumo y la importancia de la familia, para que el adolescente gane confianza y hable de estos temas en casa. Con el objetivo de generar un espacio de reflexión y construcción colectiva de estrategias en el ámbito educativo para la prevención del consumo problemático, los padres pudieron aclarar dudas y también contar sus experiencias personales.

Acompañó la jornada la regente Cecilia Gentile; la coordinadora pedagógica de 5to Año Claudia Schoenfeld; la preceptora Viviana Baldo; la subdirectora Rosana Martínez y el apoyo tecnológico estuvo a cargo del bibliotecario, Eloy Bracamonte.

En este sentido, la escuela es un ambiente privilegiado como lugar de reflexión, contención, escucha e inclusión que, además de brindar herramientas pedagógicas, construye prácticas y conocimientos acordes al tiempo y contexto; Por eso se convierte en un espacio imprescindible para desarrollar acciones preventivas.

Cabe señalar que cuando en la escuela se habla de prevención del consumo problemático es fundamental la participación de toda la comunidad educativa, destacando el papel del alumnado. Además, es necesario repensar el posicionamiento adulto en torno al consumo y las intervenciones que se realizan cuando se presentan estas situaciones, siendo siempre fundamental el compromiso de la institución en la construcción de respuestas colectivas, pensadas desde la lógica del cuidado. Trabajar en su prevención no requiere conocimientos expertos sino la decisión de poder construir respuestas integrales, sistematizadas en el tiempo y desde el lugar que cada persona ocupa dentro del complejo tejido social que constituye este problema.

Al respecto, Facundo Cócola dijo: “podemos mencionar que ‘consumo problemático’ es aquel consumo que, utilizando o no alguna sustancia química, constantemente afecta negativamente la salud física o mental del sujeto y/o sus relaciones sociales. Puede manifestarse como un consumo excesivo de alcohol, tabaco, sustancias psicotrópicas –legales o ilegales– o producido por determinadas conductas compulsivas de las personas hacia el juego, las nuevas tecnologías, la alimentación, las compras o cualquier otra conducta.

También se abordaron las dimensiones, funciones del consumo, grados de apoyo necesarios, porque es importante hablar de este tema en las familias, consumo intrafamiliar, estrategias de comunicación, procedimientos sobre cómo actuar ante situaciones emergentes, entre otros temas.

A lo que añadió, “creo que es muy importante que se impulse a las escuelas a integrar la participación activa de las familias en sus propuestas, porque la prevención del consumo problemático, como cualquier otro problema asociado a la salud mental, no corresponde exclusivamente a un sector de la población.” “Pero todos y juntos podemos hacer algo al respecto para reducir los riesgos y daños y al mismo tiempo desarrollar estrategias de promoción de la salud mucho más saludables”.

“De esta manera, cuando se da participación activa a los adolescentes y familias, las oportunidades de apoyo interpersonal son mayores ya que se enriquece la creatividad a la hora de pensar estrategias y la escuela adquiere una dimensión no sólo educativa sino también integral. que piense en la persona y en sus múltiples dimensiones”.

“En este aspecto, el colegio Adolfo Pérez Esquivel demuestra un compromiso con esta perspectiva integral en sus múltiples propuestas. Agradezco el llamado del equipo directivo a acompañar precisamente un proyecto integral y con la perspectiva de continuar con más reuniones de este tipo”, concluyó el funcionario.

Por su parte, Mariana Marino, destacó que “la capacitación fue muy enriquecedora y clara, lo que nos permitió orientar a las familias y tomar acuerdos en cuanto a la atención a nuestros jóvenes en relación al consumo problemático, donde lo interesante es el networking. , especialmente la visión desde el punto de vista sanitario de estos problemas que nos permite un abordaje mucho más eficaz. Por eso, creo que las escuelas tienen que seguir trabajando junto a las familias, apoyados por otras instituciones a través de la intervención de profesionales especializados en estos temas complejos y necesarios en el contexto en el que estamos desempeñando nuestra tarea”.

“Finalmente, es fundamental para nuestra comunidad educativa cumplir con el objetivo de generar este tipo de talleres, generar un espacio de reflexión y construcción colectiva de estrategias en el ámbito educativo para la prevención del consumo problemático, desde un enfoque integral de la salud y una perspectiva de derechos, a través de contenidos conceptuales y herramientas con el fin de orientar y acompañar desde la escuela tanto a adolescentes como a familias”, concluyó la directora.

Fuente: Prensa DGE


 
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