Zulma y Leonor Estallo Sánchez son herederas naturales de un legado millonario de sus padres; conformado por un campo de 500 hectáreas en Pergamino; 2.500 en La Pampa y propiedades en distintas ciudades argentinas.
Zulma estaba soltera. Murió en 2017. Su hermana Leonor, que hoy tiene 100 años, denunció que familiares habían torcido la voluntad de la mujer para beneficiarse de su legado. Según las leyes argentinas, la heredera natural de la herencia de Zulma es Leonor.
En ese contexto, la mujer inició un juicio que se desarrolló estos días en el ciudad de pargamino.
Según el sitio local La Opinión Pergamino, Leonor declaró ante el juez Carlos Ariel Picco.
La sala fue despejada del público y de los periodistas encargados de la cobertura. Es una solicitud del abogado demandante y aceptada por el juez Picco con base en jurisprudencia reciente sobre declaraciones de adultos mayores.
La mujer estuvo sentada en el estrado de los Tribunales Pergaminenses durante más de tres horas para responder las preguntas de las partes. Respondió con solidez y fluidez las preguntas de los fiscales Nelson Mastorchio e Ignacio Uthurry y del abogado querellante Roberto Cazorla. También respondió a todas las solicitudes de los abogados defensores de las cuatro personas en el banquillo.
Una historia que llama la atención del país
Leonor tenía dos hermanas: Nilda, fallecida en 1978; y Zulma, quien falleció en 2017 a los 99 años y padecía demencia senil y Alzheimer. Según el caso, la denunciante descubrió que, antes de su muerte, Zulma había sido engañada para favorecer en el testamento a otros familiares, quienes son quienes hoy ocupan el banquillo en el juicio oral.
Leonor llevó a juicio a su nuera, Noemí Sánchez; a sus nietos María Paula Giménez y Guillermo González Giménez; y la notaria María Florencia Peries, quien estuvo involucrada en la investigación por la presunta falsificación de su testamento.
Si son declarados culpables, se enfrentan a una pena que oscila entre 12 meses y 6 años de prisión.
La denunciante, que dentro de dos meses cumplirá 101 años, acusa a los familiares de haber torcido el testamento de Zulma y aprovecharse del deterioro de su salud para que les transfiriera esa parte del patrimonio. El debate, liderado por el Tribunal Oral en lo Penal N°1, intenta revelar si en su momento la fallecida fue quien firmó su testamento, y si finalmente lo hizo en pleno uso de sus facultades mentales y conscientes. de sus acciones.
