Según Alejandro Bustamante, presidente de la Cámara de Comercio de Jujuy, la situación es “comprometida” y requiere medidas urgentes para evitar el cierre de negocios y la pérdida de empleos.
Las bajas ventas son el principal problema que afronta el sector, con una caída de entre el 25% y el 30% respecto al año pasado. Esto se debe a la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, que ya no tienen suficiente dinero para comprar productos no esenciales.
A las bajas ventas se suman las subidas de tarifas, como las de luz, gas y agua. Estos aumentos impactan directamente en los costos de las empresas, lo que a su vez se traduce en un aumento de los precios para el consumidor final.
El endeudamiento también es una preocupación para los comerciantes, que han tenido que recurrir al ahorro y al crédito para poder hacer frente a sus obligaciones. La situación se ve agravada aún más por la desaceleración de la inflación, que, aunque es una noticia positiva, ha generado incertidumbre en el sector comercial.
Bustamante reconoció que no ha habido cierres de negocios en la provincia, pero advierte que algunos negocios se encuentran en una situación más crítica que otros. “En algunos casos pasó todo el día y no entró dinero”, señaló a Jujuy al Momento.
Para reactivar el sector, Bustamante propone que se tomen medidas para que el trabajador recupere su poder adquisitivo. También sugiere otorgar facilidades de pago y realizar convenios con bancos para que los clientes puedan acceder a los productos.
A nivel provincial, el gobernador Gerardo Morales ha anunciado que se implementarán medidas de apoyo e incentivo a las Pymes, pero Bustamante espera que estas medidas se implementen pronto.
Respecto a los aumentos de tarifas, los comerciantes analizarán los aumentos y las posibilidades de acción que tienen. También buscarán dialogar con el intendente de San Salvador de Jujuy, Ral Jorge, para discutir el ritmo de carga de combustible en la capital.
