A la espera de que Javier Milei envíe efectivamente al Congreso los documentos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, los candidatos anunciados a la Corte Suprema, en el Senado Ningún bloque muestra una posición homogénea, ni siquiera el partido gobernante por el momento.. La mayoría de los legisladores tampoco avanzan en su posición, a la espera de que el Ejecutivo abra una negociación. Los pocos rechazos apuntan al juez federal, aunque prima la cautela.
Con el argumento de que los documentos no fueron presentados y que debe realizarse el trámite de observaciones, impugnaciones y audiencias públicas, el grueso de los 72 senadores evita dar indicaciones sobre cómo votarán. De esta forma, no descartan avalar las nominaciones, aunque los bloques opositores aseguran que el Gobierno no los buscó para iniciar las conversaciones.
La confusión es tal que hubo llamados entre el radical Eduardo Vischi y los peronistas José Mayans y Juliana Di Tullio para corroborar que La inacción de la Casa Rosada, al menos por ahora, atraviesa todos los espacios políticos. En ese escenario, consideran desaconsejable sugerir la inclinación del voto, debido a la eventual negociación y también en caso de que el dictamen sea negativo para no “hacerse enemistades” con un posible juez de la Corte por varios años.
La demora entre el anuncio y el envío formal de los documentos al Senado para su trámite genera desconfianza en los propios funcionarios. “Tenemos que esperar y ver qué viene”, ellos repiten. La Casa Rosada, hermética, no les da plazos.
El Bloque de la Libertad avanza Tiene siete senadores y uno de ellos está en rebelión. Se trata del formoseño Francisco Paoltroni, quien apenas se conoció la solicitud de Lijo salió a rechazarla. “Parece un riesgo muy alto para el país”, afirmó.
Su enojo tiene una razón política. “Ese juez ha tenido un fallo que ha perjudicado a los formoseños, cuando tomó la decisión de dividir el caso Ciccone, donde fueron imputados todos los que quedaban bajo el fuero federal. (Gildo) Insfrán, que es dueño de la provincia, es dueño de la Justicia, no iba a correr otra suerte que ser destituido, que es lo que pasó”, cuestionó en declaraciones radiales.
El resto de los libertarios no se limitan a defender a Lijo, varios prefieren no hacer declaraciones, y se limitan a asegurar que como miembros del oficialismo Acompañarán los nombres propuestos por el Presidente. Y confían en “convencer” a Paoltroni para que él también se sume a la columna.
La propia Victoria Villarruel había anunciado que se había “conocido a través de los medios” de los nombres de los candidatos y señaló que para reemplazar a Elena Highton de Nolasco hubiera preferido una mujer, pero aceptó que su papel es “facilitar que la propuesta llegue a buen puerto”. .” puerto”.
Los senadores del PRO, a esta altura aliados con el oficialismo, prefieren no avanzar en su postura. Luis Juez, el jefe del bloque, informó a Milei en una reunión la semana pasada en la Casa Rosada que no acompañará la postulación de Lijo.. En los últimos días evitó hablar públicamente sobre el tema, y los cinco miembros restantes del bloque también evitaron pronunciarse.
“No puedo dar ninguna postura sobre algo que hasta ahora sigue siendo información en un comunicado de Gobierno y no se ha iniciado ningún proceso”, dijo a este diario Guadalupe Tagliaferri, del sector referenciado en Horacio Rodríguez Larreta.
como el dijo Clarín, los dirigentes del PRO tienen posiciones diferentes. Mauricio Macri rechazaría la postulación de Lijo, a diferencia de Patricia Bullrich y Rodríguez Larreta que podrían impulsarla silenciosamente. “Ninguno vota, y ninguno de los tres tiene capacidad de influir en todos los senadores”, se desmarcaron del bloque. “No nos hablaron del Gobierno y Nadie del PRO nos está dando una línea para que votemos de tal o cual manera.“, completaron.
Entre los 13 radicales, sólo Carolina Losada y Pablo Blanco anunciaron que no avalarán el documento de Lijo. El gobernador Alfredo Cornejo trasladó sus reparos a la designación del juez federal, por lo que los dos senadores mendocinos podrían tener la misma postura, aunque tanto Rodolfo Suárez como Mariana Juri evitaron las definiciones.
El resto también evitó dar su postura. “Vamos a analizar muy bien a ambos, pensando qué Corte queremos en el futuro”, se limitó a decir Vischi, jefe del tribunal.
“En el bloque hay resistencia de algunos con Lijo, no tanto con García-Mansilla”, resumió un senador radical. En cuanto a la precaución, en privado argumentaron que El avance de los documentos dependerá principalmente de Unión por la Patria, con 33 senadorespor lo que no les convendría revelar todavía el sentido de la votación.
Para avalar a un juez de la Corte se requieren dos tercios de los presentes, por lo que será decisivo el apoyo o rechazo de los legisladores que respondan a Cristina Kirchner y los gobernadores peronistas.. En el caso de que haya grietas en UxP, los votos del resto de bloques tendrán más valor.
Pero en el bloque de Unión por la Patria repiten que aún no se habla de los elegidos por Milei a puerta cerrada. Tampoco hay posiciones claras y están a la espera de que algún delegado del Gobierno se ponga en contacto con ellos.
Desde el ala más kirchnerista también se mantienen herméticos y destacan que nadie del oficialismo los consultó, por lo que Entienden que no necesitan los votos de ese sector. Incluso desde UxP comenzó a circular la versión de que podría llegar el Ejecutivo bajar las nominaciones debido a las dudas planteadas por Lijo.
Las bancadas federales, claves para inclinar los votos hacia un lado o hacia el otro, también se muestran cautelosas. En Unidad Federal ninguno de sus tres integrantes avanza sus posiciones y aseguran que no lo harán hasta que no se presenten formalmente los pliegos. “Aún no han ingresado, en su momento los analizaremos”, coinciden Carlos “Camau” Espínola y Edgardo Kueider.
Alejandra Vigo desde Córdoba habló sobre el tema, pero inclusoobjetar que ambos nombres son masculinos. “En pleno siglo XXI, con los avances y logros que han alcanzado las mujeres, sólo podemos ver con disgusto la falta de una perspectiva de género en la propuesta anunciada por el Poder Ejecutivo”, señaló apenas se reunieron las candidatas.
Una semana después presentó un proyecto para que la Corte tuviera al menos un 30% de mujeres entre sus miembros. Sin embargo, no confirmó que esta posición signifique un voto en contra de los nombres presentados. “No tengo opinión sobre los propuestos, pero sostengo que debería haber al menos una mujer en la Corte”, coincidió el salteño Juan Carlos Romero.
A su vez, la rionegrina Mónica Esther Silva -que responde al gobernador Alberto Weretilneck, en pie de guerra con el Ejecutivo- indicó que todavía “no tiene una posición tomada”. Lo mismo se transmitió desde el entorno de la neuquina Lucila Crexell y la aliada tucumana del PRO, Beatriz Ávila.
