Pablo Picasso, un “pintor de garabatos” del franquismo

Pablo Picasso, un “pintor de garabatos” del franquismo
Pablo Picasso, un “pintor de garabatos” del franquismo

Comunista“, “ateo” cualquiera “pintor garabato“fueron algunos de los adjetivos con los que los”picasofobia”, gritó el artista malagueño durante el Franquismoen cuyo tramo final hubo una escalada de tensión hacia su figura que llegó hasta el destrucción de algunas de sus obras.

Esta secuencia de ataques de grupos de extrema derecha se concentró desde noviembre 1971poco después del 90 cumpleaños del pintor, pero llegó más allá de la muerte de Francoexplica en una entrevista con EFE Nadia Hernández Hencheautor del libro “Picasso en el punto de mira. Picassofobia y los ataques a la cultura en el último franquismo”.

El punto de partida fue, ese mes, el ataque contra el Galería Theo en Madriddonde grabados del “Suite Vollard“, pero había otros en Barcelona y Valenciasegún Hernández Henche, que ofrece una conferencia este martes en el Lugar de nacimiento de Picasso sobre este período.

El pintor malagueño Pablo PIcasso .

“Cuando la visibilidad de Picasso disminuyó porque terminaron las celebraciones del aniversario, estos grupos cambiaron de enfoque y recurrieron al libroPor ejemplo, agresor a librerías y editoriales“.

El papel de Blas Piñar

En sus investigaciones, Hernández Henche descubrió el papel fundamental de Blas Piñarfundador del partido Transición Fuerza Nueva, que animó a “castigar a quienes elogiaron a Picasso” y a quien quiso honrarlo”.

“Se puede establecer una relación entre el día en que Blas Piñar hizo un reunión en el que, con su verbo inflamado y con una gran capacidad de atracción, llamaba todo a picassoy un atentado ocurrido esa misma noche o unos días después”.

Guernica .

El argumento de Piñar, “y el punto de partida de la cruzada que emprendió“, es que “no se podía entender” cómo se puede elogiar a “alguien que insultó al jefe de Estado” en la serie de grabados “El sueño y la mentira de Franco”que fueron exhibidos junto con el “Guernica” en el pabellón español de la Exposición Universal de París de 1937.

Llega un momento en que esa fijación “se corta, y Blas Piñar deja de hablar de Picassoprobablemente por indicación de Carrero Blanco o el propio Franco“dice Hernández Henche.

Atentado a la librería Cinc d’Oros de Barcelona, ​​el 25 de noviembre de 1971, que fue atacada por grupos de extrema derecha por sumarse a la celebración del 90 cumpleaños de Pablo Picasso EFE

Asociado con el infierno y el diablo.

Durante toda la dictadura, Picasso “no había sido una figura bienvenida en los sectores más conservadoresquien lo asoció con infierno y para demonioalgo fácil de comprobar en la prensa de la época, a pesar de que se trataba de un pintor muy reconocido a nivel internacional.

Además “a pesar de que había figuras como Manuel Fraga que, muy inteligentemente, cuando en los años cincuenta el Estado inició una Acción diplomática que utilizó el arte como bandera promocional. internacional de España, con artistas de primer nivel, separó la picasso hombre de picasso artista”.

“Eso pasó con Picasso desde los años 50, “Hablaron del artista pero no de su vida personal”afirma Hernández Henche, quien destaca que El malagueño “no se dejó manipular y no acudió a las bienales latinoamericanas ni a todos los eventos promovidos por el Estado”.

Amenazas de grupos nazis a la librería Rafael Alberti .

La reacción oficial ante esos ataques en los años 70 fue el silencio, “e incluso en el caso de la galería Theosus galeristas, a quienes la compañía aseguradora no quería indemnizar porque un atentado terrorista no estaba cubierto por la póliza, presentaron una demanda y estuvieron años con demandas, pero no consiguieron nada”.

Esto ocurrió a pesar de que Los agresores “dejaron panfletos, se sabía quiénes eran, estaban enmascarados y todos eran conocidos de la Policía”.Algunos ex policía cualquiera hijos de policia“.

Separación entre hombre y artista.

La separación entre hombre y artista llegó incluso muerte de picassoporque los medios afines al régimen “reconocieron al artista, pero nunca la parte personal”.

Fue producto de la operación de despolitización de Picasso que comenzó en los años cincuenta. y había funcionado relativamente bien hasta 1971cuando la cuestión política del artista vuelve al primer plano con estos ataques”.

Atentado contra la Librería Rafael Alberti en Madrid, el 7 de noviembre de 1976. Los propietarios habían organizado una triple exposición: de Pablo Picasso, Pablo Neruda y Pau Casals. MEMORIA A LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO

Curiosamente estos ataques tuvieron un efecto indeseable para sus autores, porque el mundo del arte reaccionó contra ellos“por ejemplo con un homenaje en el que participaron más de trescientos artistas, por iniciativa del galerista que fue destrozado con Cócteles molotov tu galería en Barcelonasolo porque este se llamaba ‘El taller de Picasso“.

“Probablemente obtuvieron lo contrario de lo que querían. Hubo un movimiento civil en defensa de la figura de picassopero también es cierto que Estos ataques contra la cultura fueron muy violentos y muy numerosos.más de trescientos entre 1971 y 1976”.

Para esto investigaciónHernández Henche se ha visto favorecido por el desclasificación de archivos que no habían podido ser consultados antes y también por el publicación de las memorias de Blas Piñar o de cualquier autor de esos ataques, “que explican las cosas con tranquilidad y con toda impunidad, porque están prescritas“.

 
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