España sorprendió en el Mundial de Relevos de Bahamasy cuando todo se convirtió en drama hizo añicos los pronósticos, batió un récord nacional de más de 30 años y clasificó el relevo 4×400 metros masculino y femenino para los Juegos Olímpicos de París 2024dos equipos que podrían ser tres si se confirma por ranking la clasificación del 4x100m femenino, e incluso cuatro si intentan encontrar una carrera de calidad en el relevo largo mixto ahora que todos sus componentes han hecho los deberes en los de género. Es la primera vez desde Barcelona 92 -entonces eran tres- que España traerá a los Juegos más de un equipo de velocidad..
La sorpresa empezó en los 4×400 metros femeninos, un equipo que confirmó el relevo generacional en la vuelta a la pista con cuatro veinteañeras, Carmen Avilés (2002), Berta Segura (2003), Eva Santidrián (2000) y Blanca Hervás (2002)lo que dejó en el banquillo respecto a la víspera a la treintañera Laura Bueno, siete veces campeona nacional, la única que ha bajado de los 52 segundos, y dueña de la prueba con el ausente Aauri Bokesa desde hace una década .
Las cuatro españolas borraron un récord de España que iba camino de cumplir 33 años, el que ostentaban Julia Merino, Blanca Lacambra, Sandra Myers -todavía plusmarquista nacional y la única que corrió en menos de 50 segundos- y Gregoria Ferrer. grabado en el Mundial de Tokio 1991 y que propició menos de un año después la única participación olímpica del equipo con Esther Lahoz, Cristina Pérez, Gregoria Ferrer y Julia Merino. Desde entonces, el 4×400 metros femenino español no ha entrado en los Juegos Olímpicos.
De esos 3:27.57 a estos 3:27.30, un salto cualitativo en la ronda de repechaje respecto a la primera ronda del sábado (3:31.09)y que empezó con un 53.35s de Carmen Avilés, que dejó al equipo en cuarta posición, los 51.54s lanzados por Berta Segura, que mantuvieron al equipo en la lucha, y los espectaculares 51.42s de Eva Santidrián, que arriesgó quedar atrapada por la cuerda pero maniobró bien para ganar posiciones y dejar a España sólo por detrás de Bélgica cuando recibió Blanca Hervás (51,42s), que siguió su estela hasta meta y abrió brecha con las checas, australianas y ucranianas.
El mérito, además, es doble porque tanto Segura como Hervás habían corrido una hora y media antes con el relevo mixto 4x400m. “Los últimos metros me estaba muriendo y sólo pensaba ‘que no te pillen’”, admitió Hervás. “Nosotros éramos los que más confiábamos, quizá la gente en España creía que no lo teníamos tan a mano.“, afirmó Santidrián, quien recordó a los deportistas que formaron parte de las concentraciones y no corrieron.
El relevo largo masculino regresa de Atenas 2004
Más esperanzas había en el 4×400 metros masculino, un equipo que con el 4x100m femenino está en los planes económicos del Team España Élite del Gobierno por sus resultados durante el ciclo olímpico -plata mundial bajo techo en 2022-, pero cuya actuación guadianesca dejó fuera de Tokio. Por fin habrá Juegos Olímpicos para los ‘Beatles españoles’, la generación del quinto puesto en el Mundial de Londres 2017, donde empezó todoaunque de aquel sólo quedó en el play-off Óscar Husillos tras recuperarse de los problemas intestinales que le impidieron correr la noche anterior.
El técnico Pepe Peiró movió las piezas. De Iñaki Cañal, Lucas Búa, Manuel Guijarro y Bernat Erta a Iñaki Cañal, Manuel Guijarro, Óscar Husillos y Julio Arenas, aunque también había corrido un tiempo antes la carrera mixta. El asturiano marcó un crono de 46,19s que permitió a Manuel Guijarro (44,83s, el más rápido y pura roca de Villarrobledo) liderar el carril libre, y aunque al final se puso un poco nervioso, Husillos, pese al adelantamiento del zambiano David Mulenga mantuvo su impulso en el contraataque (45,92s), y permitió a Arenas (45,45s) aguantar el ataque polaco, completar la victoria en el tramo final y levantar los brazos victoriosamente. Del 3:06.84 de la víspera al 3:02.39, una marca más cercana a la sub-3 que puede conseguir este equipo de composición variable en el pico del verano y ya estuvieron cerca del 4º puesto en el Campeonato de Europa en Munich.
20 años después de Atenas 2004, el relevo largo masculino regresa a los Juegos Olímpicos.
Los relevos largos cambiaron la cara de España, que empezó a sumar decepciones. El técnico Pepe Peiró quiso abarcarlo todo cuando parecía que la apuesta por el 4x400m mixto era la más realista. Cañal se guardó para más tarde, y formó con David García Zurita (46.25s), Hervás (51.22s), Arenas (45.46s) y Segura (52.18s), y aunque mejoró ligeramente la actuación del sábado (3:15.11), nunca alcanzó. superada por Gran Bretaña (3:12.99) y la Ucrania de Anna Ryzhykova (3:14.49), se escaparon al final. Quizás una carrera a medida para encontrar una marca antes del 30 de junio sirva para batir el récord de España en Tokio (3:13.29), ya que ahí estará la clasificación para las dos plazas restantes por ranking.
La decepción y mala suerte del 4×100 metros femenino
De los 16 equipos que correrán en Saint-Denis, 14 consiguieron el billete a Bahamas y otros dos lo harán por marca, esa es la esperanza de los tres relevos españoles que quedaron fuera. Y ninguno tiene un camino más abierto que el 4x100m femenino, aunque la decepción fue enorme, como refleja elante Jaël-Sakura Bestué, que intenta contener las lágrimas, decepcionada, reflexiva, cabizbaja, mientras a su derecha Sonia Molina-Prados intenta convencer a todos de que en verano correrán sí o sí en París 2024. Juegos olímpicosuna posibilidad que debería haberse materializado esta mañana.
España, con sus 42,85 segundos de ayer, ocupa la primera plaza de la repesca, y aún queda la Eurocopa de Roma dentro de un mes para correr aún más rápido. Es la única posibilidad para la única selección española que ha estado en unos Juegos Olímpicos en la historia y la que a priori tenía más posibilidades de hacerlo.
En la segunda ronda de clasificación del domingo ocurre lo mismo que la noche anterior. Maribel Pérez que recibe con clara ventaja y acaba postrada en la recta ante el poderío de la marfileña Maria-Josée Ta-Lou, dos veces medallista mundial y marca personal de 10,72s en los 100 metros lisos, una maravilla con la que es imposible estar frente a frente. Cuanto más difícil se vuelve Italia, que con cuatro atletas del nivel de España, tres de ellos sin bajar de los 11.30s, rozó el podio mundial el pasado verano en Budapest y ahora gana la serie en 42.60s.casi el récord español que corrió la misma alineación española de Sonia Molina-Prados, Jael Bestué, Paula Sevilla y Maribel Pérez para ser 5ª en el Mundial de Eugene 2022, un techo aún no superado.
En Nassau, las españolas corren en 42,88s, un poco más rápidas Sonia Molina-Prados (11,80s) y Paula Sevilla (11,48s lanzados), un poco peor Jaël Bestué, el pilar de este equipo con 10,13s lanzados y mucho más débil es el teóricamente más rápido, Pérez (10.47s), que promete que todos lo han dado todo y reconoce que no han tenido suerte: el sistema de clasificación no tiene en cuenta tiempos, sólo posiciones. El sábado terminaron en sexto lugar, pero el cuarto puesto en la serie más rápida los dejó fuera. El domingo volvió a ser el turno de Costa de Marfil, a pesar de que fue el único país de los que quedaban para esa ronda que corrió más rápido que España, una decisión de la organización difícil de entender, y con el sexto tiempo del total También se quedó a las puertas.
El 4×100 masculino compite sin reservas
El otro relevo, el 4×100 metros masculino, paradójicamente el que más veces ha participado en Juegos Olímpicos (1920, 1924, 1928, 1972, 1976, 1988, 1992 y 1996) necesitará de un milagro, ya que la repesca es Cotizado ahora por debajo de los 38,46s del récord español que de momento parece lejano. En Bahamas el equipo no rindió a su mejor nivel. 39,35s el sábado y, peor aún, 39,51s el domingo. Sergio López Barranco (9,50s) y Guillem Crespí (9,61s) intercambiaron posiciones para que el murciano cerrara esta vez después de que Arnau Monné abriera (10,63s) y Daniel Rodríguez (9,77s) completara la segunda curva.
El equipo se quejó de que sólo cinco atletas fueron enviados a las Bahamas, lo que dejaba poco margen de maniobra: Pablo Montalvo voló pese a una posible rotura de isquion porque ya no se podían cambiar los billetesy López Barranco arriesgó su físico el sábado pese a un esguince de tobillo minutos antes de la primera carrera. “Un Mundial que clasifica a unos Juegos Olímpicos pasa pocas veces en la vida, entonces iba a dar el 100% por todos los compañeros y concentraciones que hemos hecho. Estamos muy decepcionados, el objetivo era bajar de los 38,80”, explicó el murciano.
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Ismael Pérez es periodista experto en atletismo y deportes olímpicos. Se enganchó a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y desde entonces es feliz siguiendo las competiciones desde la tribuna de prensa, hablando con los deportistas, siguiéndolos en las redes sociales y contándoles historias, pero también saliendo en bicicleta o saltando en un concierto.
Estudió la Licenciatura en Periodismo en la Universidad de Valladolid y tiene un Máster en Periodismo y Comunicación Digital en la EAE Business School de Madrid. Ha vivido en Turín y Roma y ha cubierto actualidad de todo tipo en El Norte de Castilla, El Mundo de Castilla y León, Televisión Castilla y León, Rome Reports y trabajó en comunicación corporativa en Burson Cohn & Wolfe. También ha escrito sobre grandes campeonatos de atletismo en Somos Olímpicos, Vavel o Foroatletismo y ha hablado en la IAAF Global Running Conference en Lanzhou (China).
Con una trayectoria de más de una década en la profesión, desde 2019 está vinculado a Runner’s World, Men’s Health y Women’s Health en las revistas Hearst y escribiendo sobre la actualidad del atletismo competitivo, carreras populares, triatlón, trail running, olimpiadas, aunque En ocasiones también ha probado con el ciclismo, la escalada, la vela, la natación, el tenis, el piragüismo, el judo, el snowboard… o cualquier cosa que tenga cabida en los Juegos Olímpicos (no en las Olimpíadas).
