Nueva York. Expertos sobre él espacio comentó lo que sucederá cuando tres satélites del Administración Nacional de Aeronáutica y Espacio (MACETA) salir.
Según dijeron, los satélites, que pesan cada uno como un elefante, están a la deriva, perdiendo altitud poco a poco.
Asimismo, estos dispositivos llevan más de dos décadas observando el planeta Tierra, ayudando a pronosticar el clima, gestionar incendios forestales, monitorear derrames de petróleo, entre otras cosas.
Sin embargo, los años pesan mucho y pronto estarían enviando sus últimas transmisiones y comenzará su lenta caída a la tierra.
“Cuando los tres orbitadores (Terra, Aqua y Aura) se apaguen, gran parte de los datos que han estado recopilando terminarán con ellos y los satélites más nuevos no tomarán el control”, dicen los expertos de la NASA.
Susan Solomon, química atmosférica del Instituto Tecnológico de Massachusetts, dijo: “Perder estos datos irremplazables es simplemente trágico”.
Y añadió: “Justo cuando el planeta más necesita que nos centremos en entender cómo nos afecta y cómo le estamos afectando, parece que estamos desastrosamente dormidos al volante”, afirmó.
Fin de Terra, Aqua y Aura
Según The New York Times, el año pasado, la NASA encuestó a científicos para obtener ideas sobre cómo el fin de Terra, Aqua y Aura afectaría su trabajo.
Por eso, en sus cartas, que The New York Times obtuvo a través de una solicitud de la Ley de Libertad de Información, los investigadores expresaron preocupación.
Estos satélites han contribuido a lo largo de la historia a recopilar información sobre las partículas del humo de los incendios forestales.
Asimismo, el polvo del desierto, las columnas volcánicas, medidas del espesor de las nubes.
Además, mapas a escala fina de los bosques, pastizales, humedales y cultivos del mundo.
Como enfatizaron los científicos, el fin de los satélites Terra y Aqua afectará la forma en que monitoreamos otro factor importante de nuestro clima.
Será difícil medir cuánta radiación solar recibe, absorbe y rebota el planeta en el espacio.
Waleed Abdalati, ex científico jefe de la NASA y ahora en la Universidad de Colorado Boulder, señaló: “Nos quedamos enganchados a estos satélites. Somos víctimas de nuestro propio éxito”, afirmó el Dr. Abdalati.
Con información de The New York Times.