El arquitecto salmantino Antonio Fernández Alba Murió este martes a las 96 años. Fernández Alba es una de las figuras más destacadas de la arquitectura española de la segunda mitad del siglo XX y Medalla de Oro de la ciudad de … Salamanca, entre otras importantes distinciones.
Entre sus obras se encuentran las Campus de la Universidad Jaime I de Castellón, el anfiteatro del Parque de las Naciones de Madrid y el Centro de Investigaciones Biológicas del CSIC, también en Madrid. Además, a él se deben proyectos como los Colegios Nuestra Señora Santa María y Monfort de Madrid; el Monasterio de Rollo, el convento de las Carmelitas Descalzas y el Colegio Mayor Hernán Cortés (todos ellos en Salamanca); el Tanatorio Municipal de la M-30 de Madrid y la Escuela de Arquitectura de Valladolid, entre otros.
Arquitecto desde 1957 por la Escuela Técnica Superior de MadridDoctor en 1963 y catedrático de Elementos de Composición desde 1970, Fernández Alba, que en 1989 ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, es también autor de una amplia producción literaria con casi una treintena de obras relacionadas con el urbanismo, el espacio y la teoría del arte y la arquitectura.
Fernández AlbaEn una de sus visitas a la Universidad de Salamanca, criticó la forma en que se han construido las ciudades modernas, “siguiendo las leyes del mercado y no las que rigen la ética y la racionalidad de la convivencia humana”.
Sin embargo, reconoció que después de la crisis económica de 2011comenzamos con un nuevo modelo, “con un crecimiento hacia el bienestar coherente con el hombre que vive en la ciudad y con el entorno en el que desarrolla su actividad”.
Fernández Alba a lo largo de su carrera siempre ha tenido muy presenta tu ciudad natalEspecialmente “con sus murallas y con un río literario, el Tormes”, como recordó en las jornadas ‘Memorias de la Fundación Juan March’.
Tiene importantes reconocimientos por su trayectoria profesional. A destacar el Premio de las Artes de Castilla y León (1988), la Medalla de Oro de Arquitectura (2002), la Medalla de Oro de Salamanca (2002), el Premio Nacional de Arquitectura a la trayectoria profesional (2003) y la Medalla de Honor de Menéndez Pelayo. Universidad Internacional (2004).
